Dom. Dic 22nd, 2024

El Gobierno confirmó que el país llevará adelante una indagación especial sobre los efectos de los alimentos transgénicos. El objetivo a partir de ahora será priorizar la salud de los ciudadanos.

El histórico paso que México dio sobre la industria alimentaria

El actual mandatario mexicano confirmó a través de una conferencia de prensa que el país comenzará a investigar sobre el uso del maíz transgénico, el cual se comercializa bajo una estricta autorización. Las autoridades tendrán como principal objetivo mejorar la calidad de vida de los consumidores.

En detalle, el jefe de Estado tomó la decisión de crear un equipo de profesionales mexicanos y estadounidenses que sean capaces de analizar la situación en la que se encuentra la producción de alimentos.

Desde el Gobierno indican que las miradas estarán puestas en determinar si el consumo de los alimentos transgénicos tiene efectos directos en la salud de la población.

En esta línea, se reconoce la importancia que tuvo el pedido de Estados Unidos respecto a la conformación de un panel de especialistas que puedan resolver dicho debate. Se trata de un escenario comprometedor para el país vecino.

El trabajo que llevarán adelante ambos países pretende formar a un grupo de trabajadores con particular conocimiento sobre el tema, particularmente sobre los potenciales riesgos del maíz modificado.

Desde presidencia aseguran que la salud del mexicano está por encima de cualquier relación comercial. Esto quiere decir que los líderes se comprometieron a entender en profundidad el tema. 

El uso legal de los transgénicos en México

El país decidió darle un freno al uso de los alimentos transgénicos en febrero de este año. Desde entonces está prohibido el uso del maíz modificado para producir masa y tortilla, siendo USA el principal proveedor del país.

Ante esta situación poco beneficiosa para el territorio norteamericano, las autoridades solicitaron la creación de un grupo que se encargue de estudiar a fondo la situación.

Ahora ambas naciones se encuentran confrontadas en términos de negocios, incluso pese a las necesidades que presenta el sector. Las regulaciones del país afectan de forma directa la relación comercial.

¿Qué son los alimentos transgénicos y en qué se diferencian de los naturales?

La modificación que sufren los alimentos tiene como eje central el rendimiento de los cultivos y la satisfacción a las nuevas demandas de la población. Es una tecnología que permite obtener determinadas características, lo que potencia su valor y nutrición.

A pesar de los beneficios que le aportan a la industria, algunos expertos notan algunos cuadros que afectan a la salud y al medio ambiente.

La discusión sobre el uso de los transgénicos se compone por quienes se muestran a favor y en contra. Aquellos que se ponen a su producción, llevan a cabo una lucha para obtener una regulación digna.

En el caso del maíz, este se caracteriza por tener resistencia a la invasión de plagas y al uso de los herbicidas. Además, tiene la capacidad de mejorar la calidad de los nutrientes.

En relación con los riesgos para la salud, los estudios resaltan una posible relación entre el consumo del maíz transgénico y las reacciones alérgicas de los consumidores. Además, se notan otros problemas como enfermedades como leucemia.

Actualmente México lo usa para alimentar a un cierto grupo de animales. Además, con eso se puede transformar la industria del almidón y contemplar el consumo humano en menor medida.

Los riesgos que supone la creación de transgénicos

En lo que respecta al medio ambiente, hay una preocupación que radica en la posible transferencia de genes a otras especies. Esto podría llevar a la desaparición de varias poblaciones silvestres.

Las características genéticas pueden desplazarse en los cultivos cercanos, llegando así a los animales que viven allí. Por este motivo, solicitan llevar a cabo las medidas de bioseguridad que permitan la prevención de contaminación genética.

Esto puede lograrse mediante evaluaciones de riesgo, regulaciones nacionales y promoción de prácticas sostenibles. Es importante también ahondar sobre los efectos que podrían tener en el futuro.

Con el fin de aliviar los efectos negativos en el ecosistema, los funcionarios llevan adelante la iniciativa de establecer un grupo de especialistas que puedan analizar en profundidad el maíz transgénico.

El territorio mexicano también pretende alcanzar una solución completa frente a la adopción de este producto, abordando a su vez los desafíos y las necesidades a nivel mundial.

Es importante destacar que el país tiene una regulación especial para los alimentos modificados. Se trata de una ley que se creó para prevenir y reducir los efectos que aparecen a partir de su consumo. 

La única excepción que hay es el caso del maíz. No está permitido su uso para producir las conocidas tortillas. La legislación que hay les permite a las autoridades controlar el bienestar de sus habitantes.

Solo las buenas políticas gubernamentales podrán permitir el acceso a una alimentación sana y equilibrada.

por Federico Trucco

¿Quién es Federico Trucco? Federico Trucco, nacido en Rosario, Argentina, el 27 de mayo de 1977, es un destacado profesional con una sólida formación en bioquímica, malezoología y patología vegetal, así como en administración de empresas. Su trayectoria se ha centrado en la intersección entre la agricultura y la biotecnología, con más de 15 años de experiencia en el desarrollo de empresas innovadoras en este campo. Tras completar sus estudios universitarios en bioquímica en la Universidad Estatal de Louisiana, Federico continuó su formación con una maestría en malezoología y patología vegetal en la Universidad Estatal de Colorado, seguida de un doctorado en Ciencias de los Cultivos en la Universidad de Illinois en Urbana-Champaign. Durante su tiempo en Illinois, también adquirió conocimientos en administración de empresas. Su interés por la biotecnología aplicada a la agricultura se ha visto impulsado por su pasión por el avance tecnológico en el sector, así como por su compromiso con la innovación. Este interés lo llevó a unirse a Bioceres, una firma líder en la gestión de proyectos en el ámbito agro-biotecnológico. Desde entonces, ha desempeñado roles clave en la investigación y desarrollo de la empresa, así como en la creación y dirección del centro de biotecnología de Bioceres, conocido como INDEAR. En 2011, fue nombrado CEO de Bioceres, liderando el camino en la expansión y desarrollo de la empresa. Bajo su liderazgo, Bioceres se ha convertido en un referente en América Latina en el campo de la biotecnología agrícola, con una presencia destacada en la Bolsa de Valores de Nueva York. Federico ha sido reconocido por su contribución a la innovación empresarial, recibiendo premios como el Konex a la innovación empresarial y el premio EY Entrepreneur of the Year para Argentina. Además, ha ejercido como presidente de la Cámara Argentina de Biotecnología, demostrando su compromiso con el avance y desarrollo de este campo en su país.